Si estás preparando oposiciones, es bastante probable que termines sufriendo del síndrome del opositor, un problema muy conocido por las academias, y sufrido, pero desconocido por gran parte de los opositores que buscan hacerse de una plaza en el mercado de empleo público.
En este artículo, te explicaré qué es el síndrome del opositor, y cómo puedes evitarlo y tratarlo. Además, este artículo también será útil si no eres el opositor, sino un familiar que cree que puede que tu amigo, familiar o pareja, están sufriendo de este problema. Sin más dilaciones, vamos al grano:
¿Qué es el síndrome del opositor?
El síndrome del opositor es un trastorno o desorden psicológico que suelen sufrir múltiples estudiantes en todo el mundo, al estar expuestos a un alto nivel de estrés, sumado a la carga laboral regular, y las horas de sobreesfuerzo que requieren el preparar unas oposiciones como se debe.
Todo esta presión y estrés, deriva de un agotamiento físico y mental, además de una ansiedad prolongada, la cual puede desarrollarse de forma distinta en cada persona. Por ende, no es nada raro, que la persona cuente con total incapacidad para poder llevar a cabo tareas necesarias para continuar, y así llevar a la postergación del estudio, lo que termina por causar un círculo vicioso, donde el pensamiento de no avanzar agobia al estudiante, pero la idea de seguir estudiante también es agotadora y estresante.
Además, en esto también influye el aislamiento social que se suele sufrir durante la preparación de oposiciones, puesto que, generalmente, se requiere de mucho tiempo para poder preparar unas oposiciones correctamente, y el poco tiempo libre, se utiliza para estudiar, lo que, más allá de sobrecarga, también puede, en ocasiones, hacer sentir a algunos estudiantes en depresión.
Básicamente, y en resumen, el síndrome del opositor, es causado por la autoexigencia, causando frustración y ansiedad ante la creencia de no poder alcanzar los objetivos propuestos, y no obtener la plaza deseada, durante el periodo deseado. Por ende, esto también puede derivar en el síndrome del estudiante, donde la procrastinación perdura, inclusive cuando el estudiante verdaderamente quiere dar todo de sí, pero no puede, tendiendo a retrasar los estudios, y autosabotearse.
Síntomas
- Pensamientos de Invalidación
- Ansiedad
- Sueño irregular
- Agotamiento extremo
- Frustración y falta de motivación
- Aplazamiento de las tareas y estudio
- Falta de esperanza
Causas del síndrome del opositor
El síndrome del opositor es causado principalmente por la autoexigencia, pero no es la única causa detrás de este problema. Cada caso es único, y no es nada raro que, al dedicar múltiples horas, surjan situaciones que hagan sentir incómodo al opositor.
Y es que, así como hay casos de estudiantes que procrastinan demasiado, también está el caso contrario. Estudiantes que se enfocan tanto en el estudio, que se olvidan por un periodo largo de tiempo de sus amigos o pareja, reduciendo tanto el contacto social, que puede afectarnos negativamente, debido a que somos seres sociales.
Lo ideal, es desarrollar una estrategia saludable de estudio, donde se pueda equilibrar todo lo más posible. La diversión y el ocio también son necesarios para poder ser estables, por lo que es importante que prestes especial atención a este aspecto.
Además, no es nada raro que otros elementos puedan afectarte, como la presión de familiares o amigos para preparar dichas oposiciones, y mucho más si la presión es económica, y estás apostando el todo a estas, para poder conseguir unos ingresos estables.
Todo esto, se puede empeorar con cualquier variedad de factores normales de la vida cotidiana, como la situación laboral del opositor, cómo es su vida personal, y demás. Sin embargo, estos son solo factores que afectan aún más, y que, en sí mismos, no son causantes del síndrome del opositor.
Cómo tratar el síndrome del Opositor
El síndrome del opositor no es nada nuevo, y de hecho, es más común de lo que crees. Es lo primero que tienes que saber, antes de conocer cómo tratarlo. Además, no se trata solamente de las oposiciones, sino que, también es algo muy normal en el ámbito universitario, aunque en ese caso, se le suele llamar «síndrome del estudiante quemado», y está compuesto básicamente por los mismos síntomas.
A continuación, te explicaremos qué es lo que deberás hacer, y qué no, para poder tratar este problema, bien sea solo, o con el apoyo de tu familia y amigos:
Reconoce el problema
Lo primero que debes hacer, es reconocer el problema, y asegurarte de que se trata realmente del síndrome del opositor, ya que quizás lo estés confundiendo con una depresión, o algún otro problema, aunado a factores externos.
Los consejos que te daremos a continuación, son solo para tratar el síndrome del opositor, pero si realmente estás en un nivel de desmotivación demasiado grande, podrías consultar a un especialista para que te brinde detalles más personalizados y profesionales.
Cuidado con el estrés externo
En ocasiones, no nos damos cuenta, pero el estrés externo puede afectar mucho unas oposiciones. Cada caso es completamente distinto, pero lo ideal, sería evitar a toda costa las situaciones que nos puedan estar afectando negativamente, y que puedan estar agobiándonos aún más.
Simples costumbres como evitar el periódico (que hoy en día está repleto de noticias negativas), o evitar los contactos que no nos apoyan, es muy fructífero.
Desarrolla una estrategia realista
En ocasiones, y sin darnos cuenta, terminamos por crear una estrategia nada realista a la hora de estudiar. Por ejemplo, si trabajas 8 horas al día, puedes asumir que como mucho, y de forma realista, podrías trabajar 2 horas al día aproximadamente. Sin embargo, asumir que podrás estudiar los 5 días de la semana por completo ¡Es una locura!
El descanso también es clave dentro de una estrategia de estudios, por lo que, asegúrate de tomar al menos un día a la semana para reconectarte contigo mismo, olvidarte de lo que está pasando, y salir un rato, o simplemente descansar de una semana ajetreada.
Considera que, a fin de cuentas, el cerebro no es más que una máquina, y que también requiere descanso para funcionar apropiadamente. Esto no solo lo decimos nosotros, sino que hay estudios al respecto, indicando que la falta de sueño, inclusive puede afectar causando depresión.
También, según datos, la falta de sueño afecta negativamente en el desempeño de los estudiantes, por lo que es un causante directo del síndrome del opositor.
Reconoce tu propio esfuerzo
En ocasiones, es difícil reconocer nuestro propio esfuerzo, y entender que el éxito no llega de un minuto a otro. Cada quién es diferente, y el esfuerzo que estás aplicando ¡También es válido! Por tanto, asegúrate de no solo criticarte por lo que haces mal, sino también de premiarte por lo que haces bien.
Los refuerzos positivos son mucho más efectivos que durar todo el día criticándote a ti mismo, y exigiéndote más y más. El esfuerzo es importante, sí, pero también es importante sentirnos autorrealizados, y reconocer qué es lo que estamos haciendo bien.
Sé flexible
Si bien, la elaboración de un cronograma de estudios es importantísimo para poder prepararte para una oposición, también es clave ser flexible cuando hay que serlo.
No somos robots, y en nuestro día a día, pueden suceder situaciones extraordinarias que se escapan de nuestras manos, y que, por ende, requieren de flexibilidad, y de reconsiderar nuestro plan inicial. Por ejemplo, si surge algún problema durante tus preparaciones, intenta reducir la cantidad de horas utilizadas, hasta solventar dicho problema, y así poder tener el 100% de nuestra capacidad, concentrada de manera directa en las oposiciones.
Si puedes, inscríbete en una academia
En Oposición Perfecta, no satanizamos el preparar oposiciones por tu cuenta. De hecho, creamos una guía sobre la preparación de oposiciones por libre. Sin embargo, tampoco es un secreto para nadie que no todo el mundo es autodidacta, y que hay muchas personas que dependen de un instructor, y de un seguimiento académico para poder dar su máximo rendimiento.
Si eres de ese tipo de personas, ¡No te preocupes! Es algo bastante normal, y se resuelve mediante una academia de oposiciones. Previamente, también comentamos sobre algunas de las academias más populares de España, y comentábamos cuáles eran las que, posiblemente, eran más interesantes para ti, por si te interesa.
