Tipos de empleados públicos en España ¡Conócelos!

Antes de preparar cualquier oposición, es importante conocer los tipos de empleados públicos en España, puesto que de no conocer bien cómo funciona el sistema público, podríamos terminar con una plaza que realmente no nos interesa, o prepararnos equivocadamente para una plaza que quizás no sea compatible con vosotros.

Por tanto, en este artículo conoceremos todos los tipos de empleados públicos que existen, cuáles son las diferencias entre cada uno, y cuáles son las características únicas y clave que debes conocer. Estos son:

• Funcionarios de carrera
• Funcionarios interinos
• Personal laboral
• Personal estatutario
• Personal eventual

A continuación, os brindamos detalles más específicos de cada uno:

Funcionarios de Carrera

En esta categoría, se encuentran todos los trabajadores de la Administración Pública, y que, a su vez, se encuentran regulados por el Derecho Administrativo para llevar a cabo sus labores profesionales, con una retribución consistente, como un pago mensual, quincenal o semanal.

Generalmente, estos se encuentran dentro de cuerpos que pueden ser Cuerpos Generales o Cuerpos Especiales, desempeñando tareas específicas o tareas comunes, dependiendo de para cuál se aplique.

Los Cuerpos Generales se encargan de trabajos más comunes dentro de una rama, como bien es el cuerpo técnico, administrativo, auxiliar, subalterno o de gestión, mientras que el Cuerpo Especial se encarga de las gestiones específicas de dicho actividad profesional, como por ejemplo, encargarse directamente de las labores que realiza un bombero, o un policía.

En cambio, el resto de tareas, como la administración, los trámites, vigilancia, custodio, mecanografía o labores de auxiliar o gestión, son las que son otorgadas al Cuerpo General de los Funcionarios de Carrera.

Funcionarios interinos

Los funcionarios interinos son aquellos que son puestos en un cargo por una necesidad de urgencia, y por tanto, suelen ser nombrados en plazos exprés para desempeñar cargos que requieren de un funcionario a cargo de manera inmediata.

Se caracterizan por no tratarse de vacantes regulares, como suele suceder en las oposiciones regulares, y porque no se pueden ocupar temporalmente por funcionarios de carrera que ya se encuentren ejerciendo cargos similares, bien sea porque la carga de trabajo es excesiva, o porque simplemente, no hay un personal lo suficientemente preparado para rellenar la plaza, al menos de forma transitoria, hasta que se lleven a cabo las siguientes oposiciones.

En este caso, para los funcionarios interinos, se suelen crear bolsas de trabajo con los aspirantes que hayan participado de una oposición previa, y que no hayan superado el proceso selectivo, y por ende no hayan obtenido el empleo, adquieran la plaza.

Personal laboral

Dentro de esta categoría, se encuentra todo tipo de personal que haya sido contratado, bajo un contrato formal y escrito, para la prestación de servicios bajo la modalidad de un salario por parte de la Administración Pública, o algún Organismo Público.

Este tipo de personal, puede ser contratado por tiempo indefinido, o por un plazo temporal, el cual deberá ser determinado en el contrato, y podrá ser renovado cuando el plazo de dicho contrato finalice.

Personal estatutario

Este tipo de personal, se enfoca directamente en los que se encuentran trabajando para el Sistema de Salud de España en cualquiera de sus regiones o CCAA. Este será elegido mediante un proceso selectivo, para un cargo permanente de función, mediante el nombramiento.

Por otro lado, también se encuentra el personal estatutario temporal, el cual solo es asignado mediante un periodo de urgencia o de manera temporal, como algo sumamente extraordinario, por la incapacidad de cubrir una plaza en un periodo específico.

Personal eventual

El personal eventual es el equivalente al outsourcing, y básicamente, solo se contrata para funciones específicas, que requieran de un asesoramiento o tareas específicas. En este caso, y como suele suceder con el trabajo a destajo, solo finalizará el periodo de empleabilidad, una vez las metas propuestas hayan sido alcanzadas, o el objetivo específico para el que se ha contratado, haya finalizado.

En este caso, no se trata del acceso a la Función Pública, ni mucho menos de una promoción interna, por lo que no será reconocido como tal, para cualquier fin.